Vox populi, vox Dei

Ya se nos fué el 15 de septiembre compadre y el grito que más fuerte se escucho fué: Chinga tu madre Agustín.

- A caray compadre que llevados, ¿quién es el mentado Agustín y que les hizo a quién con tanto encono se meten con su jefecita?

-No se haga pendejo compadre que usted también se la mentó el día del grito.

- A chinga ¿Yo? ¿Qué de al tiro me puse tan briago? Yo no conozco a ningún Agustín y nunca he sido mal briago como para insultar a alguien no’ más porque si, no compadre, a mi no me cuelgue milagritos que no soy ningún santo.

-A que pinche compadre, ¿No cuándo estábamos platicando con la familia y le dijeron que era lo que pensaba de la subida de impuesto quesque pa´ ayudarnos? usted grito: ¿Quién fué el cabrón que lo propuso?

-Mi acomedida comadre Chole le dijo clarito: ¡Ese gordito que habla re bonito pero que nos quiere chingar con los impuestos, la luz, Gasolina, Gas, Diesel y cuanta madre se le ocurre!

-Y usted más encabronado que al principio de la plática grito: ¡Pues sea quien sea que chingue a su Madre! A parte de gordo ladrón, que ni le busque porque de por si ya estamos hasta la madre con la preocupación de perder el trabajo y ahora sale con sus chingaderas, pinche gordo abusivo, ¿Cómo me dijo que se llamaba el pinche gordito ese Doña Chole?

-Cartens, don Juan, se llama Agustín Cartens.

-Pues ¡Que chingue su Madre Agustín! Contesto usted.

-A cabrón ¿yo dije eso?

-Usted lo dijo pinche compadre zacatón.

-¿Y no estaba Martín?

-¿Cuál Martín?

-El güey ese que trabaja en el gobierno.

-Claro que estaba.

-¿y qué dijo?

-estuvo peor que usted.

-¿Por?

-Porque el dijo: Que la rete Chinguen él y toda la bola de cabrones diputados que le hacen segunda. Y que me dicen de los Senadores, de los del IFE, de los de la Suprema Corte, los de Derechos Humanos y los……..

-Párele, párele Martín; le dijo la comadre Chole, al rato nos va insultar hasta a nosotros.

-Y que se para el cabrón de Martín y que nos grita: ¿Cómo creen? No los voy a insultar al rato, los insulto ahorita pinche bola de agachones, si les dicen que se empinen, se ponen de a Pino Suárez. Se quejan pero no hacen nada.

-¿Y qué podemos hacer? Si de todos modos no nos hacen caso, replico la vieja de usted, mi comadre Lolita.

-¿Cómo chingados nos van hacer caso? Replico Martín, si cada que viene un cabrón delegado o su achichincle, usted hasta de tragar les da. Como nos van hacer caso si usted no sabe hablar de otra cosa que no sean sus pinches novelas y las películas de Pedrito y su chorreada.

-¡Momento, -le grito usted compadre Juan- a mi vieja no la insulta delante de mi!

-Y que se le arranca el Martín: ¿Usted que dice Don Juan? Si no habla más que de futbol, ¿No apenas llego bien briago el día que contrabajos le ganó México al poderoso Honduras y usted se fue al Ángel como si México hubiera ganado la copa del mundo? ¿No siempre se anda agarrando a Chingadazos con su compadre Pedro porque le insulta a sus adoradas Chivas? ¡No mame Don Juan, por eso nos la meten cada que quieren, porque no sabemos hablar más que de novelas, de futbol, de chismes del dizque espectáculo, de lo chingón que es el Canelo, de que el Temo se merece ser el próximo presidente!

-A cabrón, ¿todo eso dijo el Martin? ¿Y no trabaja pal gobierno?

-Pos por eso sabe tanto compadre, porque él se da cuenta de cómo se manejan entre ellos.

-¿Y que más dijo?

-Que si seguía el Felipillo (así lo llamo él) y toda la bola de cabrones políticos con sus mamadas, que no se quejaran de que la gente se siga de largo y comiencen a asaltar los supermercados, (como trabaja en gobernación) había escuchado que ya en Ixtapalapa estaba pasando y en varias partes más, pero que la información estaba censurada.

-Ni hablar pinche compadre Pedro, no cabe duda, tenemos que hacer algo.

-¿Qué vamos hacer compadre? ¿Nos vamos a organizar para protestar de alguna manera?

-¡No mame compadre, vamos a curárnosla, lo de la política, déjesela a los políticos que pa’ eso les pagamos, ellos a lo suyo y nosotros a lo nuestro.

¿Y cuál es lo nuestro compadre Juan?

-Vivir compadre, Vivir.

Viva México Cabrones, aunque sea de milagro, pero que ¡VIVA!

Chao Bye